29 agosto 2006
United 93
Casi cinco años han esperado en Hollywood para tocar el tema de los atentados del 11 de septiembre. Esta es la historia del vuelo United 93, el último de los aviones secuestrados, que nunca llegó a su destino, y la de sus pasajeros, que en pleno vuelo optaron por plantarle cara a los terroristas, y tratar de cambiar su destino.
La película narra en tiempo real los acontecimientos que se vivieron en el avión, desde el despegue hasta el desenlace final. Han utilizado los testimonios de los familiares de las víctimas, y han tratado el tema con mucha delicadeza. No se trata de una película de acción, sino de un testimonio, casi un documental.
Los momentos más interesantes empiezan a partir del secuestro del avión. Hasta entonces se abusa de escenas y diálogos en la torre de control, primeros testigos de lo que estaba pasando. Se narran muy bien el resto de atentados, y no se pierde en ningún momento el punto de vista de las víctimas, lo que gana en credibilidad.
Que sepamos el desenlace de antemano, y al tratarse de un tema tan reciente y que todo el mundo recuerda, provoca que no emocione en exceso. Correctas interpretaciones de actores casi desconocidos. Por lo demás, al centrarse todo entre los controladores y el interior del avión, no permite muchas alegrías visuales. No explica nada, pero llena la pantalla de malos recuerdos.